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El cambio de postura del Gobierno español sobre el control del Sáhara Occidental, que ahora reconoce que debe pertenecer a Marruecos, está causando conmoción. En Argelia, la decisión de Pedro Sánchez ha causado malestar y ya es calificada de «traición histórica».
Según cuenta el español El Mundo, Argelia incluso ha decidido convocar a su embajador en Madrid para «reuniones». Fuentes «cercanas al proceso» citadas por la prensa argelina hablan de la «traición histórica» que supondrá para el pueblo saharaui la decisión de Madrid -de hecho, la «segunda traición histórica», tras el acuerdo de 1975 (el Acuerdo Tripartito de Madrid) en el que el gobierno de Franco cedió el control del territorio a Marruecos y Mauritania.
«Finalmente, Marruecos obtuvo lo que quería de España», dijo un diplomático argelino bajo condición de anonimato. Otras citas de la prensa argelina hablan de un «cambio radical» y de una «sorpresa general».
España apoya el control marroquí sobre el Sáhara Occidental
Por parte marroquí, por supuesto, la reacción contraria: el país reaccionó celebrando el “hito histórico” que es la posición de España, y que supone en la práctica que el Sáhara Occidental pasaría a ser considerado parte del Reino de Marruecos. La anterior posición española abogaba por la celebración de un referéndum para decidir sobre la autodeterminación del Sáhara, alternativa que está barajando la ONU.
Pero España ha tomado una decisión y califica ahora la propuesta de Marruecos como «la más seria, realista y creíble» para resolver el diferendo territorial.
España, que todavía se considera la potencia administrativa colonial del Sáhara Occidental desde que abandonó el territorio en 1975, ha sostenido durante mucho tiempo que el control del Sáhara Occidental por parte de Marruecos es una ocupación. A partir de ahora, el Gobierno de Sánchez reconoce que se abre una «nueva etapa» en su relación con el país, basada en el «respeto mutuo, el respeto a los acuerdos, la ausencia de acciones unilaterales y en la transparencia y comunicación permanente».
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