O El hombre que el lunes mató a su mujer y a una de sus amigas en un edificio de Madrid sería un hombre conflictivo que ya había provocado varias desavenencias con sus vecinos.
El hallazgo de tres cuerpos en un piso de la calle Serrano, una de las zonas más lujosas de la capital española, ha sido muy polémico.
Tras varias hipótesis, se concluiría que las víctimas fueron Fernando González de Castejón, de 53 años, su mujer, de 40, y un amigo suyo de 70. El hombre, que es conde de Arates, mató a las dos mujeres y luego se suicidó.
El hombre, que se presentaba ante lentes y redes sociales como un caballero, enamorado de España, era al fin y al cabo un hombre muy diferente en su esfera privada.
«Vivíamos con miedo. El hombre ya había amenazado a todos los vecinos», dijo uno de los vecinos del edificio. Otro revela que Fernando tenía «todo tipo de armas, incluso arco y flecha».
Estos mencionan que era un hombre conflictivo, que no se quedaba más de 10 minutos en reuniones de condominio, por ejemplo. Ya había tenido que llamar a la policía varias veces por su comportamiento.
El ABC español informa que Fernando «actuó como un loco» durante varios meses y que su esposa le había pedido el divorcio.
Por ello, se sospecha que puede tratarse de un delito de género, situación que actualmente analiza la Unidad Central de Apoyo a la Familia y la Mujer (UFAM).
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