Fue uno de los 28 acusados en un escándalo valorado en más de 10 millones de reales. Capó participó en un falso préstamo inmobiliario en la Caja Rural, donde trabajó como director de sucursal entre 2003 y 2004. El grupo fue acusado de malversación de más de 2 millones de euros (unos 10,7 millones de reales, al cambio actual). .
Este esquema se conoció como el “caso de la hipoteca fantasma”. Los periódicos mallorquines señalaron al líder como jefe de la organización criminal y poco después surgieron sospechas de que había huido a Brasil. El juicio por este caso no tuvo lugar hasta 2012, según El Mundo.
Antes de venir a Brasil, Capó todavía tenía trabajo en Mallorca. Tras dejar Caja Rural, el chef trabajó durante un «breve periodo» en el sector de la restauración en la isla española, informa El Mundo. Poco después, Capó huyó a Brasil, donde construyó una nueva vida y abrió un restaurante con su esposa, la brasileña Érica da Silva Santos, de 38 años.
Los muertos
El chef y su esposa fueron encontrados muertos el pasado viernes (24). David y Érica da Silva Santos eran propietarios de un restaurante en la zona de la isla Pau do Macaco, conocida por su ubicación privilegiada y acceso exclusivo en barco.
Se encontraron cadáveres a orillas del río Buranhém con heridas de bala. El caso está siendo investigado por la 1ª Comisaría Territorial de Porto Seguro. TuyoOLLa Policía Civil de Bahía dijo que investigaría las circunstancias, autoría y motivación del crimen.
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