Los agricultores que tienen sus explotaciones en la denominada ‘Horta de Europa’ en España se enfrentan a la escasez de recursos hídricos para regar 3,8 millones de hectáreas de regadío y mantener su modelo ganadero con decenas de millones de cabezas de ganado vacuno, porcino y aves, concentrados en mega -granjas.
Afectados por la escasez de agua, miles de agricultores españoles llevaron este lunes sus tractores al centro de la ciudad de León. Los manifestantes, provenientes de las regiones de Salamanca, Zamora y Leão, exigen la paralización del volumen de agua destinado a Portugal, en los términos del Convenio de Albufeira. Sin embargo, las protestas no se limitan a los agricultores o al norte de la Península Ibérica: muchos ya reclaman una revisión que actualice el acuerdo que se utiliza para gestionar los ríos compartidos por España y Portugal.
Los datos publicados por el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) a principios de septiembre indican que la reserva de agua en España se sitúa actualmente en 19.209 hectómetros cúbicos (un hectómetro equivale a 100 metros) mientras que tiene capacidad para almacenar 56.136 hm3.
Y el próximo otoño no trae buenas noticias. La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) pronostica que en el trimestre octubre-diciembre «habrá temperaturas más altas de lo normal y habrá menos lluvia». Las consecuencias de un escenario con contornos dramáticos ya se dejan sentir en territorio español.
En España, las reservas de agua se encuentran al 34,2% de su capacidad máxima y en Portugal el volumen embalsado es del 53,69%.
«Si nos quitan el agua, nos quitan el pan»
Agricultores españoles de las regiones de Salamanca, Zamora y León han dejado claro este lunes que quieren frenar el envío de 400 hm3 de agua a Portugal por el río Duero, una operación iniciada la semana pasada y que se prolongará hasta el 30 de septiembre. . . Unas 3000 personas se concentraron con más de 300 tractores en la ciudad de León para exigir cambios en el acuerdo del Convenio de Albufeira, en vigor desde el 17 de enero de 2000, para reducir el volumen de agua a enviar a Portugal a través del río Duero.
El malestar generado por los agricultores de Salamanca, Zamora y Leão está ligado al envío de 400 hm3 a Portugal en el espacio de apenas dos semanas que finaliza el 30 de septiembre. La decisión alimentó una de las consignas más escuchadas en la manifestación: “Si nos quitan el agua, nos quitan el pan”, una expresión de indignación luego de que los campesinos recibieran denuncias de que el trasvase de agua estaba destinado a la producción de energía hidroeléctrica. en las presas instaladas en el tramo portugués del río Duero, una opción que pondría en peligro los cultivos de regadío el próximo año.
El Convenio de Albufeira es un tratado internacional que regula el traspaso de agua de España a Portugal a través de ríos internacionales, que obliga al país vecino a enviar anualmente 3700 hm3 al río Miño, 7300 al río Duero, 2700 hm3 al Tajo y 600 hm3 en el río Guadiana. En total, el país vecino está obligado a traspasar 14.300 hm3 en un año normal.
El acuerdo de reparto de agua y distribución de caudal prevé que los volúmenes se envíen durante los cuatro trimestres del año. Así, y según información de la Agencia Portuguesa de Medio Ambiente (APA), el país vecino deberá verter 570 hm3 al río Duero y 130 hm3 al Tajo, del 1 de julio al 30 de septiembre.
“No al traspaso a Portugal” fue otra de las consignas más escuchadas durante la concentración que celebraron en León varias asociaciones de regantes de las regiones de Zamora, Salamanca y León. Los dirigentes de las distintas asociaciones de regantes, agricultores y ganaderos no han escatimado críticas y quejas a la vicepresidenta y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, Teresa Ribera, precisando el sentido de su reivindicación: “No al traslado a Portugal . Agua + juventud = futuro”.
Algunos de los manifestantes pedían la dimisión de Teresa Ribera, si no acepta las demandas de los agricultores que se sienten agraviados por el envío de agua a Portugal, y que pasan por alto no permitiendo más vertidos al Duero. El titular de la Asociación de Regantes del Páramo Bajo fue claro: “Queremos diálogo, pero si el ministro no dialoga, usaremos la fuerza, de lo contrario…”
El vertido de 400 hm3 dejará el embalse de Almendra, el tercero más grande de España, en un nivel históricamente bajo. Cuando las aguas comenzaron a soltarse, tenía una reserva de tan solo 861 hm3. Obtendrá aproximadamente la mitad de esa cantidad.
Problemas del agua del tajo
Para respetar el acuerdo de Albufeira más al sur, cuenca del Tajo, las autoridades españolas liberaron 126 hm3 de caudal de las presas de Alcântara y Cedillo en Extremadura.
Los caudales que se trasladan al Tajo también despiertan recelos en la población de la ciudad de Cáceres. El presidente del Ayuntamiento, Luis Salaya, ya ha asegurado a sus ciudadanos que el envío de agua no pondrá en peligro el abastecimiento público de esta ciudad española.
Según él, funcionarios de la Confederación Hidrográfica del Tajo (CHT) garantizaron que el nivel del embalse de Alcântara no bajará de los 194 metros sobre el nivel del mar, nivel mínimo que permite el funcionamiento de las bombas para captar el agua destinada al abastecimiento de las poblaciones. En la actualidad, el nivel del embalse es de 195 metros sobre el nivel del mar.
Faustino Sutil, Delegado Adjunto del Gobierno de España, ha señalado que el Secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, tiene previsto reunirse con las asociaciones de regantes para analizar posibles modificaciones al Convenio de Albufeira, teniendo en cuenta la cambio climático que han alterado significativamente el suministro de agua en los últimos años. “Quizás este año de sequía ha detectado puntos a revisar” en el acuerdo con Portugal, explicó Sutil.
El desafío
El «Convenio de Cooperación para la Protección y Aprovechamiento Sostenible de las Aguas de las Cuencas Hidrográficas Hispano-Portuguesas» (Convenio de Albufeira) se firmó en un momento en que la región de Leão y las áreas de riego estaban muy lejos de las 100.000 hectáreas actuales dedicadas al consumo de agua de estos recursos.
Actualmente, España riega 3,8 millones de hectáreas y los niveles de las principales cuencas fluviales en relación a su capacidad total son los siguientes: el Guadalquivir es del 22%; el Guadiana, con un 24,5%; el Tajo, 37,7%; el Duero, con un 37,8%, y el Ebro, con un 43,3%.
«El desafío no es la sequía, sino la escasez», observa Rafael Seiz, responsable del programa Agua del Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), y subraya que «la diferencia entre sequía natural y escasez es muy ilustrativa del desequilibrio entre la oferta y la búsqueda del agua». “España consume más agua al año que Francia, Portugal, Grecia o Italia, y también que Alemania y las tres cuartas partes para la agricultura, que es un gran consumidor de agua”.
Jaime Martínez Valderrama, investigador del Instituto Multidisciplinar de Estudios Ambientales de la Universidad de Alicante, afirma que “hay una necesidad muy urgente de cambiar el patrón de nuestra relación con el agua. Nos falta agua porque consumimos mucha agua, mucha más de la que tenemos.
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