Situación actual: la extrema derecha está en declive en algunos países y en ascenso en otros. Y cae donde antes subió, ¿significa esto que en los países donde no ha caído, caerá seguro? Aquí están las señales

Portugal, España, Italia, Francia, Alemania, Polonia… La lista es larga. Los partidos de extrema derecha ya tienen representación parlamentaria en toda Europa, en un camino que comenzó a mediados de 2015 con la crisis de los refugiados. En algunos casos, el propio gobierno es de extrema derecha. Euroescépticos, antiinmigración, conservadores, nacionalistas. Son estas ideologías las que han ganado terreno en los países europeos.

El caso más reciente es el de Italia, donde durante las últimas elecciones legislativas Giorgia Meloni, líder del partido Hermanos de Italia (Fratelli d’Italia – FdI), fue primer ministro electo. Este es el primer gobierno de extrema derecha en Italia desde la Segunda Guerra Mundial, también dirigido, por primera vez en la historia del país, por una mujer, que será la directora general más joven de Italia. Un gobierno de coalición con La Liga de Matteo Salvini, también de extrema derecha, y Força Italia de Silvio Berlusconi. Con el lema «Dios, patria y familia», Meloni encabezó una campaña basada en el euroescepticismo y las políticas antiinmigratorias, además de proponer la reducción de los derechos de la comunidad LGBTQ y el acceso al aborto.

Solo para que os hagáis una idea del crecimiento, el partido Hermanos de Italia obtuvo en las últimas elecciones, en octubre de 2022, el 26% de las intenciones de voto. En 2018, este mismo partido solo había alcanzado el 4,5%.