Las licencias para operar telecomunicaciones móviles e Internet con tecnología 5G en Brasil fueron subastadas en diciembre pasado y la mayoría de las concesiones fueron adjudicadas a Vivo (filial de Telefónica), Claro y TIM, los tres principales operadores que operan en el país desde hace décadas.
Los compromisos de inversión ascienden a 46.700 millones de reales (unos nueve mil millones de euros) durante los próximos cinco años, periodo durante el cual se estima que la tecnología 5G estará presente en todas las ciudades de más de 30.000 habitantes, donde se instalarán redes de fibra óptica de alta capacidad. .
Según la Agencia Nacional de Telecomunicaciones (Anatel), tras el inicio de los servicios en Brasilia, las redes 5G deberían estar disponibles gradualmente en las otras 26 capitales regionales hasta octubre.
Aunque aún no se han fijado las fechas, las próximas serán Belo Horizonte, Porto Alegre y São Paulo, según el cronograma del regulador.
En el caso de Brasilia, la ciudad tiene alrededor de seis millones de números de telecomunicaciones móviles, casi el doble de habitantes, pero según analistas de telecomunicaciones solo el 20% de los dispositivos utilizados pueden funcionar con 5G.
El servicio que comenzó a operar en Brasilia está disponible en poco más del 50% de la ciudad y se concentra en los barrios más ricos de la capital, donde se instalaron más de un centenar de nuevas antenas en los últimos meses.
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