La próxima cumbre ibérica, que se celebrará en Minho en el último trimestre del año, «será el momento idóneo» para anunciar los proyectos ferroviarios de alta velocidad que conectarán Portugal con Galicia, ha dicho este jueves, en Viana do Castelo, la ministra de Infraestructura.

«Tendremos una cumbre ibérica muy pronto, creo que será el momento ideal», respondió el ministro de Infraestructuras y Vivienda, Pedro Nuno Santos, a una pregunta de Lusa sobre las sucesivas ponencias de Infraestruturas de Portugal (IP) sobre la tema, pero sin una concreción definitiva.

La ministra hablaba a los periodistas en Viana do Castelo, tras el viaje inaugural de los primeros coches Arco reacondicionados, comprados a la española Renfe en 2020 por 1,65 millones de euros, para un total de 51 unidades.

«Puedo asegurarles que estamos trabajando bien con la parte española, tanto con el Gobierno de España como con el Gobierno de Galicia, y por tanto Va bien“, ha declarado Pedro Nuno Santos, asegurando que “la voluntad de conectar Galicia con el resto de Portugal es fundamental para todos los lados” de la frontera.

Según la ministra, «es del interés de Galicia y Portugal» tener la conexión.

Cuando se le preguntó si Lisboa y Madrid podrían bloquear las ambiciones regionales, Pedro Nuno Santos respondió: «no, no lo harán».

«Nosotros lo queremos. Galicia lo quiere», respondió.

Preguntado por la voluntad de Madrid, el ministro portugués respondió que «España obviamente quiere ayudar a Galicia a tener lo que quiere».

El primer ministro António Costa dijo el 3 de junio que había acordado con su homólogo español, Pedro Sánchez, que la próxima cumbre luso-española tendría lugar en otoño, en Minho, con un enfoque en la ciencia y el Laboratorio Ibérico de Nanotecnología en Braga.

La fase 1 del enlace ferroviario de alta velocidad entre Oporto y Vigo podría costar 350 millones de euros más de lo previsto inicialmentesegún un documento presentado por un director de Infraestruturas de Portugal (IP) en marzo, asciende a 1.250 millones de euros, frente a los 900 inicialmente previstos.

Sobre la conexión actual a través de la línea del Miño, y sobre la conexión entre Oporto y Vigo en tren diésel a pesar de que la línea está electrificada a ambos lados de la frontera, Pedro Nuno Santos reconoció que «hay trabajo que hacer con el gobierno español» sobre las diferencias de voltaje eléctrico entre los dos países.

Recordando que Renfe española dispone de locomotoras de doble voltaje, a diferencia de lo que ocurre con CP – Comboios de Portugal, la ministra habló de la necesidad de hacer «un trabajo para acercar a los españoles al voltaje» que se utiliza en Portugal.

El presidente interino de CP, Pedro Moreira, dijo a los periodistas en la misma ocasión que la compañía estaba «trabajando con Renfe» para resolver el problema «lo antes posible».

«Todavía no tenemos valores», dijo el gerente de la aerolínea cuando se le preguntó si la solución sería costosa, y señaló que por ahora la discusión con la contraparte española «es a nivel técnico».

Al respecto, el ministro Pedro Nuno Santos indicó que no es posible “resolver los problemas en un día, en una semana, en un año, más en un área olvidada a nivel nacional por décadas”, pero dijo que hay “clara certeza” sobre la capacidad del gobierno para hacer “lo mismo”.